Cruz de Navajas

Se reabre el caso del asesinato de Mario Postigo.

El pasado lunes, un reciente testimonio arrojó nuevas pistas sobre el crimen ocurrido hace ya más de 30 años.

Todos recordamos aquel día. Hace 35 años de aquel triste suceso ocurrido una madrugada en un pequeño barrio de Madrid. Mario Postigo, gerente de un bar nocturno, el 33, volvía de su trabajo cuando ocurrieron los hechos.  “Mario era un chico muy trabajador. Cuando cerraba la persiana, hacía la caja y llegaba a su casa a desayunar”, nos relata una vecina. 

Ese día, el trágico destino hizo que volviera antes. Era de madrugada y la policía irrumpió en el bar para una redada, lo que obligó a Mario a cerrar. Alrededor de las cinco menos diez, cansado e impotente, regresaba a su casa cuando sufrió un ataque con un arma blanca, que le costó la vida. Su mujer, María, fue testigo del crimen y describió a unos drogadictos como autores, tal y como relató a la policía, mientras se encontraba mirando por la ventana.

Recientemente, se han conocido nuevos detalles de los hechos de aquella muerte prematura. María fue testigo, pero no desde su ventana, como contó a la policía.

Lugar del suceso

Tal y como nos relató la mujer de Mario, su relación se había deteriorado por las diferentes vidas que llevaba la pareja. Ella trabaja en un almacén por el día, mientras que él pasaba todas las noches sacando adelante el bar. Sólo se veían unos instantes a la hora de desayunar, cuando Mario llegaba cansado de su jornada laboral. Esta rutina destrozó su relación, y María buscó el amor en otra persona. Ella nos desveló que Mario le sorprendió a ella y a su amante aquella madrugada, que vio la decepción en sus ojos y que en un segundo, sucedió todo. Su pareja llevaba una navaja y no recuerda nada más. No ha querido revelar la identidad de su pareja de entonces. “Se marchó y no volví a saber nada” nos relata. ¿Se quisieron alguna vez esta pareja? ¿Cómo la rutina y el hastío pueden teñir de malva el amanecer? 

Aún continúan las investigaciones para esclarecer la identidad y conocer el paradero de la persona que acompañaba a María en el momento del suceso.


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